31 octubre, 2008

hoy caigo en cuenta de tantas cosas. que he vivido una vida de quejas y lamentos y en ocasiones he dejado pasar el tiempo por la ventana. aquel feróz verdugo que no perdona, y que no espera a que uno se de cuenta para poder avanzar.

que los verdaderos problemas se encuentran entre la vida y la muerte, y no en aquellos que creemos que nos ahogan y que después que miramos hacia atrás recordamos lo superfluos que son.

que las amistades que perduran, son las que evolucionan y crecen con las situaciones a las que se enfrentan. y que de esas yo tengo unas muy sólidas.

que el apoyo y las palabras de aliento no las venden en la tiendita de la esquina. y que si las penas se comparten es menos la carga.

que pueden encontrar personas maravillosas que son como grandes y brillantes estrellas que dejan una huella profunda en el ser.

también caí en la cuenta que la vida es tan efímera, que si no caemos en la cuenta de ello, desperdiciaremos nuestro paso por el mundo.


(lo siento, parece una cadena, pero no lo es. son palabras de una depresión intermitente)

3 comentarios:

Amorexia. dijo...

Avveces es mejor no cuestionarse tan a lo interno, para no caer en estos baches, hay que saberlos llevar, estar concientes, por que siempre hay otra cara.

Saludos a deshora.

Chiriboshi dijo...

vivir, de eso se trata la vida

disfruta, para hacerla mas llevadera

¿intermitente? esperemos que desaparezca de una vez por todas, menos mal que no es interminable.

¿y si pa' la otra le ponemos piquete al cafe?

· dijo...

Esto es una ilusión.