El México Multicultural…

En pañales para enfrentar a las culturas emergentes
Por Karely Hernández.

México posee una riqueza cultural que proviene desde su conformación, esta pluriculturalidad vienen reconocida en la carta máxima, en nuestra constitución. El respeto a las diferentes etnias y pueblos que visten de colores y sabores nuestro México, no podemos dejar fuera de este mosaico a las nuevas manifestaciones culturales que se han venido gestando desde que la era tecnológica y la globalización nos llegaron al hueso.
La multiculturalidad no es asunto de análisis o algún termino que se hayan inventado, son los hechos que nos demuestran que estamos viviendo en un México de muchas culturas, las cuales coexisten en el mismo medio, pero tienen intenciones y formas de vidas que distan una de la otra. Más que pedir un trato especial para cada nueva forma de cultura, es necesario que el estado cubra las necesidades de los grupos culturales emergentes con el afán de que todos nos sintamos dentro de un mismo estado, y que entendamos que las leyes valen y se aplican para todos.
Son éstas, las culturas emergentes las que han puesto de cabeza a más de uno que conforman el gran pastel del poder. De por sí, el hecho de trabajar para el pueblo no es una tarea que los políticos cumplen muy bien, si a eso le agregamos la necesidad de trabajar cubriendo las necesidades de todas estas manifestaciones, nos estamos enfrentando entonces a una utopía. En la actualidad no hemos podido resolver asuntos como la discriminación racial hacia los pueblos indígenas; los seguimos viendo como nuestro personal de servicio, o aquellos que nos venden los quesos, sin tomar en cuenta el potencial y sin seguir impulsando el desarrollo de estos pueblos. Sólo en tiempos de campaña para alguna elección, se convierten en blanco de discusión, pero al pasar el tiempo, no hay una respuesta de fondo, todo se queda en tramas superficiales que se desploman cada fin de campaña. Otro problema social es la desigualdad de entre hombres y mujeres, no se puede hablar de una equidad de género si seguimos necesitando un “día de la mujer” para que se acuerden de no es necesario exigir derechos ya que los tenemos por el simple hecho de haber nacido.
Hasta que este cáncer de desigualdad se erradique de nuestro país, no se puede hablar de un ambiente de respeto y aceptación a las culturas emergentes, pues a pesar de que éstas pertenecen al panorama del México contemporáneo, se han tenido que conforman con un país que se preocupa por todo, pero no se ocupa de nada.
El crecimiento del país, se verá reflejado en cuanto se de paso a una verdadera pluralidad, donde los derechos de todos valgan y no se interpongan unos con otros, es así como se logrará una entidad que pueda presumir de su riqueza pluricultural, la cual deba sus bases al respeto y a la igualdad de todos como ciudadanos de éste, el México multicultural.